daños propios (propios daños) En el seguro de Vehículos, es el daño que se genera en nuestro vehículo, sin la intervención de un tercero reconocido (por servirnos de un ejemplo, daño de estacionamiento), o se proviene de la colisión con otro vehículo.
El pasado día me desperté por la mañana y vi mi vehículo con los espéculos rotos. En la noche unos maleantes las rompieron y las dejaron colgadas. Fui a la policía para denunciar la situación, y después se lo denuncié al seguro. Resulta que aun en el momento en que el vehículo estuvo bajo riesgo, la aseguradora no me pagó los daños por el hecho de que fue vandalizado.
En el momento en que el daño es provocado por un tercero
En el momento en que la pérdida es ocasionada por un tercero, de forma frecuente podemos encontrar daños que no están cubiertos por la cobertura de daños productos cosméticos completa . el valor de arreglar el inconveniente.
Esto tiende a suceder singularmente en el momento en que el hecho perjudica a muebles de cocina, donde los costos de reparación tienen la posibilidad de ser mayores.
Por María Luisa Muñoz Paredes
En el momento en que se contrate un seguro de automóvil, incluyendo la propia garantía de daños (o sea, los daños que padezca el vehículo como consecuencia de un incidente de causa externa, beligerante y también instantánea y fuera del control del asegurado o del conductor, mientras que el vehículo está en circulación, en reposo o a lo largo del transporte) los inconvenientes que tienen la posibilidad de aparecer para la indemnización no en todos los casos se imaginan satisfactorios de cobrar en una situación de siniestro. Además de la prestación de franquicias, por las que el asegurador ve limitada su compromiso y que acostumbran a sospechar una esencial reducción de la prima, hay otras cláusulas que se pasan por prominente y tienen la posibilidad de ocasionar trastornos inopinados al asegurado.
En consecuencia, el asegurado que desee conseguir una reparación completa de su vehículo podría tener una cláusula de encontronazo que tiende a excluir las reparaciones urgentes no económicas. Son las cláusulas muy recurrentes por las que se distingue la pérdida parcial de la pérdida total, y por su app si el importe de la reparación sobrepasa un preciso porcentaje del valor (comunmente la novedosa o la venal), el asegurador no lo realiza. se aceptan todos y cada uno de los gastos de reparación (siempre y en todo momento con piezas novedosas) pero se dejan libre en el momento en que se paga una cantidad menor, de forma frecuente al tiempo que el valor de mercado del vehículo.
